viernes, 18 de abril de 2008

Y resurgio de sus cenizas...

Dos días en el dique seco han bastado para que este bioinformatiquillo de pacotilla se sienta satisfecho de poder contar con su blog intacto. Tras un par de peticiones a la gente de Freehostia (que han atendido a mis peticiones de manera rápida y cortés), el blog sigue en funcionamiento. Espero que esto suceda con la menor frecuencia posible; y si no sucede más: mejor.